Es un acto que realizamos ya de modo involuntario, beber. Sin embargo no nos damos cuenta que detrás de este simple acto hay mucho protocolo, por eso en este post descubriremos cómo debo coger de modo correcto una copa de vino o de agua y cómo debemos beberlo.
Antes de beber es bien sabido que nos tenemos que limpiar los labios, para evitar dejar restos de la comida o el carmín de los labios sobre la copa o vaso.
No debemos beber con la boca llena, es mejor esperar a tragar lo que tengamos en la boca, después limpiar los labios y por último beber.
Apenas nos sirvan el vino podremos disfrutar de esta bebida, para ello debemos coger la copa por el tallo, nunca lo haremos por el pie (base de la copa), ni por la parte más ancho (cáliz).
La única copa que podemos coger al rededor de su cáliz es la de coñac, ya que de ese modo podemos mantener tibio su contenido.
El contenido se debe beber despacio con calma, sin hacer ruidos ni cuando se bebe, ni después de haber bebido.
Podemos inclinar un poco la cara, para evitar derramar alguna gota, pero que la inclinación no sea excesiva y una vez finalizado el acto de beber la pondremos erguida de nuevo.
Al beber debemos mirar hacia el vaso, no hacia la gente, ni perder la mirada. El contenido de la copa se debe beber por completo, sin dejar restos.
Debemos beber cada bebida de su copa o vaso correspondiente. Si nos sirven el vino en un vaso o en una flauta de champán debemos solicitar que nos lo cambien o que nos los versen en la copa o vaso que corresponde.
Al igual que los cubiertos no debemos:
1.- Al igual que los cubiertos no debemos pasar la copa de boca en boca. Ni compartir el liquido de su interior en otra copa o vaso.
2.- No debemos gesticular con la copa en mano.
3.- Si se cambia la bebida, imaginemos que pasamos de un rosado a un tinto, lo normal es cambiar la copa.