A quien no le gusta tener una casa en orden, limpia y bien presentable para cualquier ocasión y más si somos de los que solemos invitar amigos y conocidos a comidas y cenas.
El elemento central de una casa, en la mayoría de ocasiones es la mesa. Es en ella donde solemos reunir a toda la familia y amigos por un tiempo determinado, donde todos compartimos opiniones, conversamos y pasamos un rato agradable.
Por ejemplo en las bodas, una de las grandes protagonistas es ella misa. Su decoración se cuida hasta el mínimo detalle y debe lucir impecable.
La mesa además de presentarse de forma ideal para un servicio de comida o cena, puede albergar pequeños detalles que la embellezcan.
Los centro de mesa, son apropiados cuando queremos darle a nuestra mesa ese toque personal, pero ojo! no debemos recargarla.
Para no fallar en la elección del centro de mesa apropiado debemos seguir estos consejos:
1.- El tamaño del centro de mesa. Su tamaño no debe ser desproporcionado ni en anchura ni en altura, no debe tapar la visual de los comensales, ni excesivo espacio dentro de la mesa que dificulte la colocación correcta de la vajilla, cristalería y cubertería.
2.- La forma del centro de mesa. Normalmente los centros mantienen una relación con respecto a la mesa. Si la mesa es alargada, la decoración suele ser del mismo tipo y si es redonda lo normal es colocar en el centro de la mesa un detalle, jarrón o adorno también de forma circular.
3.- Cuántos centro de mesa pongo. Todo depende de la dimensión de la mesa. Teniendo en cuenta el espacio para colocar el servicio de los comensales y la proporcionalidad de la mesa. Por ello podemos optar por un centro de mesa grande y vistoso o varios más pequeños.
4.- Combinación. Debemos de ser coherentes a la hora de elegir los adornos. Antes de nada debemos tener en cuenta el menú y la época del año donde nos encontramos; Semana Santa, Navidad, etc… Basándonos en estos hecho podremos elegir centro e mesa que combinen con nuestra cubertería, cristalería o mantelería.
5.- No se desmontan. Tenemos que considerar los centros de mesa como pequeñas obras de arte y las tenemos que respetar como tal. En algunos lugares es tradicional, sobre todo en bodas, quedarse con las flores que forman el centro de mesa. No está bien visto desmontar un adorno floral, si propio se debe hacer, lo mejor es esperar a que el evento o ceremonia finalice.
6.- Olores. Cuando escojamos un centro de mesa, tenemos que evitar que sean muy perfumados, ya que podrían mezclarse con los aromas de la comida o del vino. El olfato es un sentido íntimamente unido al paladar. Hay gente que disfruta mucho con el vino, por ejemplo, y oler un tinto con aroma a rosas puede estropearle el momento.
7.- Si el centro es de flores o frutas, que sean naturales, nunca flores secas o de plástico, lo mismo sirve para las frutas.
8.- Los centros de mayor tendencia son los que combinan flores de temporada con otros elementos como pueden ser frutas frescas, bayas, ramas verdes u hojas o incluso bodegones con piñas.
9.- Las velas son ideales para la noche. Deben ser de cera virgen, sin olor y blancas a excepción de Navidad que el color rojo. Si las colocamos en candelabros, que no sean excesivamente barrocos o grandes.