Tanto si eres un creyente practicante como si no, la Pascua es un día festivo para celebrar con la familia o los amigos con alegría y convivencia.

Si ha decidido organizar un almuerzo en casa, es necesario tener en cuenta algunos elementos que determinarán el éxito del evento. En primer lugar, asegúrese de que sus invitados se sientan cómodos.

Veamos algunos de los consejos que debemos de tener en cuenta para que estas festividades sean todo un éxito.

Las Felicitaciones

Al igual que en Navidad, los saludos escritos en papel son siempre los mejores y más apreciados.

Envíe con unos días de antelación una tarjeta sencilla pero escrita con cariño, esta es la fórmula más adecuada para desear una Feliz Pascua a sus seres queridos.

Si realmente no quiere ceder al encanto de la tarjeta, las alternativas serán o ir a visitar, con previo aviso, a quienes pretenda desear una Feliz Pascua o, más simplemente, dedicarse a una bonita ronda de llamadas telefónicas.

Olvídese, incluso en este caso, de mensajes estandarizados y de mensajes que no agradan a nadie pero que, por el contrario, suelen molestar a quienes los reciben obligados a escuchar el timbre del teléfono durante todo el día.

Recibimiento

También con motivo de Semana Santa es agradable tener amigos y familiares en casa y pasar momentos felices juntos, quizás organizando un almuerzo o una cena para compartir.

Para la ocasión, será bueno tener un poco de previsión en la decoración de la casa, haciéndola cálida y acogedora pero también alegre y colorida según el espíritu de esta temporada y festividad.

Las alternativas para disfrutar de unos momentos en compañía de sus amigos pueden ser diferentes y también deben elegirse en relación a la formalidad que pretendes dar al encuentro. Con motivo de la Pascua, de hecho, será posible organizar:

• un almuerzo formal, perfecto para aquellos que quieran enfatizar la importancia de esta ocasión y el tiempo pasado con la familia
• un brunch festivo, ideal para quienes quieran vivir estas fiestas con un ánimo decididamente más relajado
• un té o un tentempié, una excelente solución para pasar tiempo juntos de forma poco exigente
• una cena relajada, una idea interesante para encontrarse con amigos
• un picnic, apto para disfrutar plenamente de los primeros días cálidos de la primavera

Cómo organizar la mesa de Pascua

Para poner la mesa de Pascua lo importante es tener en cuenta que lo mejor es utilizar colores claros y suaves y motivos primaverales. Luego podremos aprovechar los elementos típicos de Semana Santa como los huevos y los conejitos.

Usar flores de temporada también es una gran idea para poner la mesa de Pascua.

Lo primero que debemos hacer es decidir el estilo que queremos adoptar: elegante, shabby chic o simple.

No sobrecargue la mesa con decoraciones de colores: la opción ganadora es poner todo en blanco y jugar con los detalles refinados.

Por ejemplo, puede ser una buena idea utilizar un mantel de lino blanco, servilletas a juego y platos de porcelana siempre blanca. Las copas de cristal y los cubiertos son obligatorio.

Incluso para las decoraciones, elija la simplicidad: los huevos están bien, pero mejor si están decorados en colores suaves o directamente blancos.

Un jarrón de flores frescas de temporada también funciona bien como centro de mesa.

El menú

Redactar el menú de Pascua puede resultar muy complejo.

Los platos principales estarán todos muy ligados a la estacionalidad, los espárragos, las espinacas, las alcachofas, los huevos serán grandes protagonistas, pero habrá que tener cuidado en la elección de algunos alimentos un tanto problemáticos. De hecho, es tradicional en muchos lugares servir platos a base de cordero y conejo, platos que, sin embargo, podrían ofender la sensibilidad de muchos.

Dada la gran abundancia de productos que nos ofrece la naturaleza en esta época del año, la mejor solución para no tener demasiados problemas podría ser optar por un menú de base vegetariana que se integre, posiblemente, con algún plato más importante a elegir según al gusto y necesidades de los huéspedes.

Los regalos

También con motivo de Semana Santa es de buena educación rendir homenaje a los seres queridos con un pequeño obsequio.

Nada exigente, eso sí, pero una bolsita preparada ad hoc con huevos de chocolate o dulces tradicionales será apreciada por todos, incluso por los adultos a menudo olvidados en estas fiestas.

Para los niños habrá huevos de Pascua tradicionales, cuidando que por tipo, sabor y tamaño sean adecuados a la edad de quien los reciba y que estén elaborados con chocolate de buena calidad.

La única precaución es no exagerar o los niños correrán el riesgo de un fuerte dolor de estómago y los adultos una lucha continua para evitar que los pequeños acaben sintiéndose mal.